A menudo he oido que l@s peluquer@s son como terapeutas, te sientas y la gente le cuentan sus problemas. Lo mismo pasa con los tatuadores, A lo largo de mis dias como tatuador he escuchado miles de historias de todo tipo, mientras estoy "pinchando" al personal, me suelen contar los detalles mas intimos de sus vidas.
Mi objetivo cuando tatuo a una persona es que se sientan lo mas comodos posibles, ya que, como es mormal, la gente se pone nerviosa ante la perpectiva del dolor. Asi que suelo romper el hielo con alguna broma o una serie de preguntas básicas. Y enseguida, empiezan a abrirse.
Muchas veces las personas no tiene a nadie con quien hablar y necesitan que le escuchas, y cuando te tiene delante, solo para ellos durante unas cuantas horas aprovechan la situación. de todas maneras, yo no me puedo ir a ninguna otra parte, de modo que lo unico que puedo hacer es escuchar. Yo no suelo dar consejos, mas bien comparto algo de mis experiencias personales con ellos. Es gratificante conectar durante el tiempo que esta tatuando con esa persona y crea un vinculo temporal entre ambos.
Como tatuador, si consigues que el cliente se sienta comodo, es mas que probable que vuelva se decide hacerse otro tatuaje. Al mismo tiempo uno se hace popular como profesional si tienes buena mano con la gente, asi que intento trata a todo el mundo como me gustaria ser tratado a mi mismo.
No importa cuantas historias me cuente, nunca me canso de escuchar. La gente viene y me explican sus historias mientras yo les pongo tinta bajo la piel.
ES EL MEJOR TRABAJO DEL MUNDO.
